Lujo, relax y vistas privilegiadas. Nada mejor que disfrutar de unas vacaciones dentro de una piscina con impresionantes vistas a la sabana
para contemplar la vida salvaje que nos rodea, perdidas en mitad del desierto,
devoradas por la selva y por densos bosques tropicales, con formas de jardín
colgante o cascadas infinitas… Cuando la temperatura empieza a subir, no hay
nada mejor que disfrutar de un relajante baño en uno de los lugares más
privilegiados del planeta. El blog de viajes Bon voyage, te presenta los más
idílicos lugares donde refrescarse.

1. Banyan Tree en
Seychelles: Una piscina
infinita con espectaculares vistas a la bahía y engullida por la selva en la
isla de Mahé, propiedad de George Harrison y Peter Sellers… Disfruta, en tu
villa privada, de una copa de champán mientras observas el mar turquesa
fundiéndose en el horizonte.
2. Ubud Hanging
Gardens en Bali: Elegantes suites
se disponen a modo de terrazas sobre la ladera de una montaña en mitad de la selva.
Un paraíso al que el viajero sólo puede acceder en teleférico privado… Desde
la piscina privada de nuestra villa, diseñada con forma de jardín colgante, se
contempla cómo se perfilan los contrastes verdes y marrones de los arrozales.
El viento de la tarde zarandea el paisaje.
3. Leopard Hills en
Sudáfrica: Con inmejorables
vistas a la reserva privada de Sabi Sand, cerca del Parque Nacional de Kruger,
pocas piscinas son comparables a la del inconfundible Leopard Hills… Nada hay
mejor que contemplar el amanecer mientras a escasos metros del Lodge, una
familia de elefantes desfila ante nuestros ojos.
4. La Residence
D´Ankor en Camboya: Rodeada de
palmeras, bungavillas y amanyacos, la panorámica piscina de agua salada de La
Residence D´Ankor nos recuerda a los cercanos y hermosos lagos Baray. Mosaicos
hechos a mano de bellas tonalidades de verdes cubren su forma en mitad de un
frondoso jardín tapiado. Todo ello ambientado al más puro estilo jemer…

5. Hacienda Uayamon
en México: A la luz de las
velas, es un auténtico ritual nadar en la piscina al aire libre de esta antigua
hacienda del s XVI y relajarnos flotando en sus hamacas tejidas en algodón, al
estilo maya, entre paredes de piedra cargadas de historia y leyendas…
6. Banyan Tree
Lijiang en China: Cuando el viajero
pasea por el pueblo y los alrededores de Lijiang, experimenta la impresión de
autenticidad que produce la belleza sin maquillaje. Allí, en la piscina privada
de la villa, el tiempo no existe. Las vistas espectaculares a la Montaña Nevada
del Dragón de Jade, enmudecen los sentidos.
7. Qasr Al Sarab en
Dubai: Con un cóctel en
la mano, puedes descansar en una piscina perdida en medio del desierto.
Caprichosas villas de lujo se integran en verdes oasis en mitad de las
impresionantes dunas…
8. Mena House Oberoi
en Egipto: A la sombra de las
pirámides de Giza, un baño relajante nos transporta al origen de la
civilización. Pocos son los privilegiados que tienen la oportunidad de vivir
este momento tan especial. Una historia milenaria cargada de misterio y de
grandes enigmas se abre ante los ojos del viajero ante el sobrecogedor paisaje
faraónico.

9. Palacio Umaid
Bhawan en India: Con vistas a la
Ciudad Azul de Jodhpur, en el estado indio de Rajastán, esta relajante piscina
climatizada se ilumina por la noche con velas y pétalos de rosas esparcidos por
su superficie. El intenso aroma a jazmín y a especias se mezcla en una nube de
olores que embriaga los sentidos.
10. Blue Palace en
Creta: Los mismos parajes
de azul intenso, que fueron testigo del nacimiento y auge de una de las
primeras civilizaciones del Egeo, reciben al viajero a su llegada a Creta…
Dime, ¿a que te
apetece un baño? ¡Cuéntamelo!